sábado, 22 de diciembre de 2007

¿Villa María crece?

No hacen falta datos estadísticos para corroborar el crecimiento inmobiliario que ha tenido la ciudad de Villa María en los últimos dos o tres años, basta con levantar la vista y observar la cantidad de edificios erguidos sobre lo que otrora fue una chata ciudad, que se extendía hacia los alrededores de los bulevares.

Esta situación ha despertado todo tipo de comentarios y admiraciones, algunos hablan de progreso, otros de crecimiento, de bonanza, de edificios sojeros, de negocios y negociados y si bien es cierto que la construcción es un excelente movilizador del circuito económico, cabe preguntarse ¿Villa María crece?

Si hablamos de m2, sin lugar a dudas, en agosto de 2007 se solicitaron permisos para nuevas construcciones por 20.363 m2 y 4.415 m2 para ampliaciones, mientras que en el mismo mes de 2006 las cifras fueron de 16.522/2.453; octubre, marzo y julio de este año le siguieron en orden de permisos, con 17.870/2.763 m2, 12.899 /3.054 m2 y 11.932/2.2987 m2, respectivamente; en total a pocos días del cierre del año son cerca de 100 mil los metros cuadrados que se autorizaron en Villa María, cifra que supera en un 4% al período anterior [1].

No puede dejarse de lado, en este análisis, lo sucedido en Villa Nueva, donde la inversión inmobiliaria también fue considerable, sólo que en forma de barrios residenciales; así a la vera del Talamochita aparecieron loteos de ensueños, a precios que precisamente te borran el sueño.

A quién, entonces, se le ocurría pensar que eso no es progreso y crecimiento. ¿Es progreso y crecimiento? A mí.

El destino de este boom edilicio no tiene otra finalidad que el de producir una renta especulativa , que es sino, el disponer de uno, dos o diez departamentos para alquilar; no caben dudas que esa enorme rentabilidad que hoy, mayoritariamente, está generando el sector agropecuario en la región no se está invirtiendo en un circuito productivo que genere riqueza para la ciudad .

Creo, desde una óptica económica muy primitiva (no soy economista), que este negocio de los edificios tiene un 'techo', en uno, en cinco o en diez años, quizás; que estará limitado mientras no se generen fuentes de trabajo genuinas o nuevas fuentes, porque Villa María no puede eternamente seguir incorporando gente para trabajar sólo en el comercio, habida cuenta que la incidencia de la Universidad Nacional (UNVM) ha decrecido hasta situarse en las cifras tradicionales de estudiantes de nivel superior que tuvo la ciudad.

Convengamos que los edificios aparecen erguidos como chimeneas, pero no largan humo, están lejos de ser alguna de las 40 empresas/industrias que Nora Bedano prometió, en campaña, que iban a instalarse en Villa María durante su gestión, más distante aún de una política de cara a los próximos 50 años.


[1] Datos proporcionados por la Municipalidad de Villa María y la Gerencia de Estadísticas y Censos de la Provincia.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Con respecto a este tema les recomiendo leer la "zoncera Nº 29", de Arturo Jauretche, que habla sobre la División Internacional del Trabajo; en particular sobre el destino que tiene la lana producida en una estancia de Leleque (Chubut) y dónde van a parar los dividendos que ella genera. Es interesante y, además, bien podría adaptarse a nuestra realidad ¿dónde va a parar tanto dinero invertido en automóviles importados, en pick up 4x4, edificios o complejos de departamentos en cualquier barrio de Villa María?

Anónimo dijo...

Mmmmm, citando al MAestro Jauretche, ojo! no te vayas a transformar en un soldado "jauretchano-accastel...". jajaja.
Realmente si hay una clase social que no cambia su conducta,ni sus intereses y como a lo largo de toda su historia,jamás arriesga, es la "terrateniente",no?

Anónimo dijo...

El problema no es sólo ese, sino que a la clase política o dirigente tampoco se le ocurrió algo al respecto... A pesar que en "su" Universidad (UNVM) tienen una carrera que se denomina DESARROLLO LOCAL Y REGIONAL, que precisamente hizo planes de desarrollo local y regional en otras localidad y en otras regiones.

RAULO dijo...

ES UN TEMA MUY LARGO Y MUY TECNICO.
LA INVERSIÓN EN INMUEBLE HACE QUE LOS SOJEROS, TEMEROSOS DE LOS DEPOSITOS BANCARIOS, ENCONTRARON UN NUEVO NEGOCIO EN HACER DEPARTAMENTOS DE MEDIO PELO PARA ESTA PUJANTE CIUDAD. OJO QUE TAMBIEN HAY INVERSORES PORTEÑOS QUE PUSIERON EL OJO EN LA VILLA DE OCAMPO. NO ES UN DATO MENOR, NO?
ESTO HIZO QUE LOS TERRENOS COMO LAS INVERSIONES INMOBILIARIAS TENGAN UN PRECIO SOBREDIMENSIONADO, PRODUCTO DE UN MONOCULTIVO QUE ESTA EN LA BUENA.
NO QUIERO PENSAR QUE PUEDE PASAR SI TENEMOS ALGUN PROBLEMA, COMO FUE LA AFTOSA EN LAS VACAS, QUE VA A PASAR CON TANTA SOJA SEMBRADA Y QUE VALOR VA A TENER LOS DEPARTAMENTOS LUEGO DE ESTA TRAGEDIA.
POR OTRO LADO, LA COMPRA DE LAS 8X8 LOS DEPTOS, CASAS DE VERANEO, Y DEMAS GILADAS, HACE UNA DESINVERSION EN EL CAMPO, PRODUCIENDOLE UN DAÑO MAYUSCULO AL SECTOR AGROPECUARIO.
SI ARGENTINA NO CRECE ES PRODUCTO DE LA VENTA DE LOS PRODUCTOS EN CRUDO Y NO SON ELABORADOS O SEMIELABORADOS; SI SE HICIERA DE ESTA MANERA TENDRIA UN VALOR AGREGADO MUY IMPORTANTE COMO LA MANO DE OBRA ESPECIALIZADA. ESTO AYUDA QUE NUSTROS HIJOS DEBAN IRSE DE NUESTRA AMADA ARGENTINA A OTROS LARES, PERDIENDO PROFESIONALES, HECHOS EN LAS UNIVERSIDADES ARGENTINAS, CUYO COSTO LO AFRONTARON LOS IMPUESTOS DE LOS ESTUPIDOS QUE LO PAGAN.